Dejar el coche aparcado en un camino de tierra y echar a andar para perderse entre el verdor de la Sierra hasta detenerse en aquel escondite, un lugar que pocas personas han pisado antes porque la ausencia de residuo alguno así te lo hace saber. Extender la toalla sobre la hierba, tenderse en silencio junto al ser amado y dejarse embriagar por el entorno.
Llegados a este punto, escuchar con atención el rumor de aquel río que, acompañado por un auténtico coro formado por mil especies de aves diferentes, parece empeñado en susurrarte una nana tan relajante que acabará por convertirse en una irresistible invitación a los brazos de Morfeo.
Y ya está. No se necesita mucho más para ser feliz.
Si acaso, un pinchito de tortilla a media tarde...
Si acaso, un pinchito de tortilla a media tarde...
15 comentarios:
Estupendo plan, vamos para no volver a la contaminada ciudad en mucho tiempo.
hola,
el hombre necesita los grandes espacios abiertos y la naturaleza. La gran ciudad nos cambia para mal.
un saludo
Silaro
Suficiente. Muchos empeñados en creer que es el dinero lo que da felicidad, y resulta que esos momentos felices que vivimos nos lo dan las pequeñas (o grandes) cosas como ese plan que nos cuentas.
Un beso
Salud y República
Me encantaría poder hacer eso por aquí. Hay cien mil maravillosos y umbríos lugares perdidos entre los bosques de Walonia, pero ¡ay!, casi siempre llueve y hace frío. Y si no llueve, ha llovido el día anterior y la hierba está mojada...
Me has traslado a ese lugar y sí...que paz, que maravilla :) Espero que el fin del mundo nos pille a todos así :) Un abrazo inmenso preciosa!!! Me encanta la foto también!!!
Favole
Bellísimas palabras Perséfone!! Y estoy de acuerdo contigo totalmente..!
Además, muchas gracias por pasarte por mi blog..
Un beso y gran abrazo para ti mujer!!
Bonita reflexión... la foto me ha hecho volar muy lejos durante unos instantes.El texto tb me ha dibujado una sonrisa... me ha traído algo optimismo.. porque tienes razón, no se necesita mucho para ser feliz.
Me apunto a ese plan, Perséfone. Eso sí, que no falte la tortilla y un poco de tinto de verano.
Un abrazo de Mos desde la orilla de las palabras.
Me apunto. "Beatus ille..."
Un beso.
Que bonito.
Cuando vivía en Madrid me encantaba irme al Retiro, me compraba una empanada de atún en una tienda al lado de casa, me cogía el metro, y al Retiro a pasar el mediodía-tarde... me gustaba ir incluso sola a leer :) eran mis planes de los sábados en lugar de salir por ahí jjaja. No se, a mí me encantaba porque respiraba paz
Guauuu!! Que ratito más estupendo!!! Me apunto a la de ya!
Besos!
Una foto refrescante y un mensaje esperanzador...Ciertamente tienes razón, que sencillez y que complicación la nuestra...Vivan las pequeñas cosas y los pequeños detalles!!!..
Un abrazo.
hola, me encanto tu blog!!!
es hermoso,
te sigo :)
saludos desde:
http://mi-mundo-flash.blogspot.com.ar/
Gracias a todos por vuestros comentarios. Me alegra que tanto la entrada como la imagen os hayan inspirado sentimientos positivos.
A los que pasáis por aquí por primera vez, bienvenidos.
Besos y abrazos para todos.
La gente que no encuentra la felicidad es porque no sabe apreciar las cosas más simples.
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