Una nueva andadura

No. No es que no tenga suficiente con dos bitácoras, ni que tenga intención alguna de abandonar una de las que mantengo actualmente para poder dedicarme a una tercera que acaba de nacer (al menos no por el momento). Tampoco quiero repetirme más que el telediario ni estar en todas las salsas.

Es simplemente que llevaba mucho tiempo apeteciéndome el crear un nuevo espacio para orientarlo expresamente a mi vida profesional y a todas aquellas opiniones, experiencias y recomendaciones relacionadas con la educación y el mundo de la infancia en general y de paso dejar este blog libre de estos temas que siento ya se cuelan con demasiada frecuencia por aquí.

El caso es que al fin me he decidido a crear ese "Diario de una Educadora" (¿O acaso debería decir mejor 'Diario de un proyecto de educadora'?) a pesar de no saber cuándo se me pasará la fiebre bloguera ni el tiempo que seré capaz de mantener mis tres espacios al día.

Aunque intuyo que, especialmente en sus comienzos, éste me servirá más como desahogo personal que como un lugar en el que ofrecer información interesante para todo tipo de lectores, espero, con el tiempo, poder ir tejiendo algo que realmente merezca la pena y, sobre todo, que perdure.

Ni que decir tiene que estáis todos invitados a leer mis nuevas peripecias por aquellos lares, siempre que os apetezca y/u os resulte suficientemente interesante lo poco que, por el momento, tengo que contaros que no sepais ya quienes me leeis con mayor o menor asiduidad.

Espero que al menos en este caso no se cumpla aquel refrán que rezaba que 'el que mucho abarca, poco aprieta' y esta nueva andadura por la red no signifique tener que dejar nada de lado. Aunque pensándolo bien, es el tiempo lo que precisamente me sobra en estos momentos...