domingo, marzo 11, 2012

Cumpliendo sueños... con delfines

El vídeo ha corrido por toda la red, convirtiéndose en protagonistas de telediarios, periódicos digitales y, por supuesto, redes sociales. La escena tuvo lugar en la costa de Río de Janeiro (Brasil). Mientras un grupo de bañistas disfrutaba de un día de playa que debería haber sido como cualquier otro, sucedía lo siguiente:



Las imágenes, sin duda, emocionan.

A mí personalmente me ha resultado imposible no imaginar que hubiera hecho yo estando en su situación, llegando a la conclusión de que la mayoría (o así quiero pensar) reaccionaríamos del mismo modo que esos anónimos protagonistas que se hallaban en el lugar adecuado en el momento adecuado.

Curiosamente también se me ha hecho inevitable el no rememorar aquella experiencia que pudimos vivir en septiembre del 2011 de la mano de una asociación que lucha por la conservación de los cetáceos y que aunque para ambos fue especial, para mí supuso cumplir un auténtico sueño: avistar delfines en su hábitat natural. Y todo gracias al nene, a quien no le importó madrugar y hacerse más de 200 kilómetros en un día de nuestras vacaciones en Sanlúcar de Barrameda para poder acercarnos a Tarifa, lugar desde donde en principio salía el barco, y darme así el capricho de mi vida.

La situación estuvo un poco accidentada al principio, ya que hacía muchísimo viento y el viaje tuvo que retrasarse varias horas, trasladándose la salida a Algeciras, pero diría que, pese a la angustia de no saber si al final saldría la cosa adelante, todo mereció la pena.

Por desgracia nuestras cámaras no son lo suficientemente buenas como para hacer unas fotografías con una calidad medio aceptable, pero lo cierto es que no me hacen falta. Sé que es una vivencia que jamás olvidaré. Y es que creo que viéndoles chapotear a nuestro lado, jugar entre ellos, saltar y salpicarnos o nadando junto a sus crías me sentí más viva que nunca.

¿Qué tendrán estos animales que tanta empatía nos despiertan?

9 comentarios:

Mos dijo...

Yo tampoco sé qué tendrán los delfines pero me parecen encantadores, inteligentes y tienen cara de buenos. Diría que solo les falta hablar. Un poco parecido a los perros.

Un abrazo de Mos desde la orilla de las palabras.

RGAlmazán dijo...

Es verdad que despiertan empatía. Se ve como animales buenos, inteligentes, juguetones, graciosos. Son animales preferidos por los niños. Una experiencia única y preciosa.
Besos

Salud y República

albers dijo...

Buenísimo Perséfone, vale difundirlo por todas las redes sociales. Además es una muy buena lección, como se pueden lograr cosas desde la solidaridad..

Un gran abrazo.

Tropiezos y trapecios dijo...

Muy bonito el vídeo. Y que envidia lo de ver delfines en libertad, tuvo que ser una experiencia increíble. Me alegro muchísimo.

Un saludo.

Ehse

Trinity dijo...

Qué gente más maja la del vídeo, ayudándoles a regresar a mar abierto, y qué suerte haberlos visto tan de cerquita, Perséfone.

Mi sueño sería nadar con delfines, no sé si algun día, pero me encantaría, y eso que no soy mucho de agua, pero tiene que ser increíble estar entre estos animales. Quizás despierten nuestra empatía por su simpatía, inteligencia y por ser mamíferos...¡ah! y por ser de los pocos animales que practican sexo por puro placer, sin objetivo de procrear :P

Analogías dijo...

Pues menos mal que era de día y la playa estaba llena de gente...Si no, sería difícil devolverlos al mar. A mí me encantan también los delfines. Son inteligentes y creo que nos queda aún mucho que descubrir sobre ellos.

Saludos.

Sorokin dijo...

Es raro el despiste de los delfines. Había oído hablar de ballenas despistadas que terminan en una playa, e incluso de sirenas: ver si no "la sirena varada" de Casona ;-), pero no de delfines. Y devolverlos al mar es lo más natural.

Una vez, en un restaurante de Bournemouth, conocido por el buen pescado que sirven, me propusieron carne de delfín que rechacé indignado. ¡Horror! no he vuelto nunca.

Perséfone dijo...

Mos - ¿Será, tal vez, esa eterna (y aparente) sonrisa la que nos despierta tanta simpatía?

RGAlmazán - Y muy positivos para la salud. Sólo hay que ver los avances que se producen cuando uno se somete a eso que llaman "delfinoterapia".

albers - Me alegra muchísimo que te haya gustado el vídeo. Esa era la intención principal de esta entrada.

Tropiezos y trapecios - Desde luego que lo fue. Creeme que, aunque suene exagerado y hasta cursilón, me cuesta encontrar las palabras para definir lo que uno siente. Hay que vivirlo para saberlo.

Trinity - Hasta hace poco nadar con delfines era también mi sueño, pero me enteré del tipo de medios que se utilizan para capturar a estos seres tan magníficos y las condiones en que viven una vez son extraídos de su medio natural sólo para que ciertos señores se llenen los bolsillo de dinero y te aseguro que se me quitaron las ganas. No te negaré que me encantaría poder estar tan cerca, tocarles y jugar con ellos, pero no a cualquier precio.

Analogías - Pues sí, menos mal que la playa estaba atestada de gente, sino creo que el desenlace no habría sido, por desgracia el mismo. Seguro que quedan todavía muchísimas cosas que no sabemos sobre ellos.

Sorokin - No creas. El varamiento de delfienes es relativamente frecuente, más en nuestros días. Hay supuestamente varios motivos que explican el fenómeno, como que puedan seguir a un líder enfermo y desubicado, aunque la que más fuerza toma es que es el sónar y el ruido de los barcos los que los despistan de tal manera.

Creo que yo también habría rechazado la carne de delfín (y mira que en ese sentido soy bastante respetuosa con todas las culturas).

Muchísimas gracias a todos por vuestras visitas y comentarios. Nos vamos leyendo.

Mr Blogger dijo...

Jejeje, que suerte tienes con tu nene (a cuidarlo ¿eh? :)). Por cierto... ¿no tendrá una hermana libre por casualidad? :P

Tonterías aparte, los delfines son posiblemente los animales más empáticos, junto con los perros y gatos gracias a su gran inteligencia.

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